POR JESÚS PRIETO
Hoy, 9 de febrero, se cumplen exactamente 125 años de la fundación de la Centenaria Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Humildad. Desde sus redes sociales, y de una manera sencilla, la hermandad se está encargando de recordar a los cofrades que tal día como hoy en el año 1896 un grupo de personas decidió unirse en torno a la imagen del Señor Humilde que se veneraba en la parroquia del Soterraño.
Y lo están celebrando con la impronta que caracteriza a esta gran cofradía. Desde la sencillez y la humildad.
Es verdad que el tiempo de pandemia obliga a celebrarlo todo con mucha cautela. Pero también es verdad, y creo que no me equivoco, que la cofradía de la Humildad tampoco hubiera tirado la casa por la ventana para celebrar el aniversario.
Hasta dónde los conozco son una hermandad que, sin hacer excesivo ruido, han construido unos cimientos fuertes que la hacen ser tan grande como la que más.
La devoción intensa que sienten sus cofrades hacia el Señor de la mano en la mejilla es difícil de explicar con palabras. Pero es muy fácil de comprender cuando los miras a los ojos o cuando los oyes hablar de las cosas de su cofradía.
También es muy fácil de comprender cuando se entra por las puertas de su casa hermandad para asistir a cualquier acto y notas, con solo mirar, cuánto de implicados están con el Señor y con su Cofradía todos los que están allí.
Y, todo esto, sin mencionar aún la grandiosidad de su desfile procesional en la calle. El importante número de túnicas de capa roja que llenan la comitiva de su Estación de Penitencia y que, más de una vez, son la envida, sana envidia, de otras hermandades.
Yo nunca puedo ver su procesión porque, a la misma hora, estoy acompañando a la Virgen de los Remedios. Tan sólo algún año lo he visto por el Llano Alto mientras yo, con mi cofradía, voy por el Llano Bajo.
Pero aun así, aunque no pueda ver su procesión, sé que son una cofradía grande todo el año porque grandes fueron y grandes son los que custodiaron y ahora custodian la fe y la devoción al Señor de la Humildad.
FELICIDADES