AGUILAR. El hallazgo de una placa de mármol rojo en la calle Moralejo durante el desarrollo de unas obras que está efectuando la compañía eléctrica Endesa ha levantado cierta polémica sobre su datación histórica.
Aunque parece que la duda la despejan desde el propio Ayuntamiento. El concejal de Obras, Antonio Maestre, ha confirmado a GRUPO COMUNICA que “no se trata de un resto arqueológico procedente del antiguo castillo de Aguilar cómo se ha afirmado en distintos ámbitos”.
Según explica a GRUPO COMUNICA “se ha errado en su procedencia puesto que está documentado que dicho material fue adquirido en la vecina localidad de Cabra en el año 1860 coincidiendo con las obras de pavimentación en la calle Moralejo siendo alcalde José Marcelo García de Leaniz”.
De este modo parece que pueden despejarse las dudas que pudieran existir. Aunque, según Maestre, la duda apenas podía darse porque, casi desde el principio estaba claro a qué periodo histórico pertenecía la pieza.
LAS OBRAS NO SE HAN PARALIZADO
El edil de Obras también ha confirmado que las obras no se han paralizado. De hecho han continuado su desarrollo normal y ya se ha cubierto toda la zanja una vez que se han introducido las conducciones necesarias para el cableado eléctrico.
En Aguilar Noticias hemos recabado dos opiniones al respecto de este hallazgo.
LA OPINIÓN DE MELI CARBAJO, ARQUEOLÓGA.
La arqueóloga y estudiosa del castillo de Aguilar, Meli Carbajo, ha señalado que, en un primer momento, la pieza de mármol podría ser perfectamente compatible con las que existían en el patio de armas y en otras dependencias de la fortaleza aguilarense.
Además, añadió que la construcción se desmanteló y destruyó precisamente para realizar muchas obras públicas y mejorar edificios civiles y religiosos de Aguilar durante el siglo XIX. No obstante, reconoció que si aparece alguna prueba documental que testifique que la procedencia de esta pieza de mármol es otra no habrá nada más que decir.
No obstante insistió en que esas pruebas deben ser fehacientes y contundentes fruto de un estudio en profundidad. Carbajo dejó muy claro que la pieza guarda muchísima similitud con las que existen en el yacimiento del castillo.
LA OPINIÓN DE DIEGO IGEÑO, CRONISTA OFICIAL DE LA CIUDAD
Por su parte Diego Igeño, cronista oficial de Aguilar, manifestó que sin evidencias documentales o arqueológicas no se puede vincular su origen al castillo, cómo tantas veces hemos oído, o a una compra específica realizada por el Ayuntamiento.
Una vez que desde el Consistorio confirman que existe constancia documental de la compra de este material parece que se despejan todas las dudas y hay que descartar que se trate de un resto arqueológico procedente del castillo.
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