AGUILAR. Era previsible que la avalancha humana que ayer hubo en las calles de Aguilar podría traer alguna
consecuencia negativa sobre el mobiliario urbano. Aunque es seguro que los destrozos siempre son ocasionados por unos pocos “gamberros” que se escudan en el anonimato y en la actuación en pandilla.
En esta ocasión les ha tocado a los vecinos de la calle Lorca que se han tenido que levantar esta mañana recogiendo la tierra de las jardineras recientemente colocadas para embellecer la calle. Unas jardineras que no es la primera vez que son atacadas. El vecindario no ha querido esperar ni a que lleguen los servicios de limpieza del Ayuntamiento. Ellos mismos, escoba en mano, han querido adecentar su calle.
Como dicen algunos de los afectados, “podrían haberse entretenido en desparramarle a sus madres las tierras de sus macetas en sus patios y balcones si tanta gana tenían de hacer el ganso”. Pero, seguramente, estos mismos “gansos” aparentarán ser “corderitos” en presencia de sus más allegados.